Tan buen ganadico,
y más en tal valle,
placer es guardalle.
Ansi que yo quiero
guardar mi ganado
por todo este prado
de muy buen apero.
Con este tempero,
y más en tal valle,
placer es guardalle.
Pastor de buen grado
yo siempre sería,
pues tanta alegría
me da este ganado,
que tengo jurado
de nunca dejalle,
más siempre guardalle.
Juan de la Encina (1468 - 1529)